Kevin Strickland entró a prisión cuando aún no cumplía 20 años y ha salido de ella con 62. Pasó 43 años encerrado en una cárcel de Missouri, Estados Unidos, condenado por un triple asesinato que no cometió en 1978. Entonces, un jurado formado mayoritariamente por blancos lo declaró culpable del crimen basándose solo en el testimonio de una testigo que, además, se detractó después. Este miércoles, un juez del mismo estado ordenó su liberación.
Strickland, que siempre ha sostenido que estaba en casa viendo la televisión cuando ocurrieron los asesinatos, se enteró de la decisión cuando la noticia apareció en la pantalla del televisor mientras miraba una telenovela. Los presos comenzaron a gritar, contó a los medios locales.
“No estoy necesariamente enojado. Todo esto es demasiado. Creo que he creado emociones que todavía no conocen”, afirmó a los periodistas al salir del Centro Correccional de Missouri Occidental en Cameron. “Alegría, tristeza, miedo. Estoy tratando de averiguar cómo expresarlas juntas”, agregó. Además, Strickland apuntó que le gustaría involucrarse en los esfuerzos para “evitar que esto le suceda a otra persona”, y remarcó que el sistema de justicia penal “debe ser derribado y reformado”.
En su decisión, el magistrado James Welsh concluyó que no existió “ninguna prueba física que implicara directamente a Strickland” en el asesinato de Sherrie Black, Larry Ingram y John Walker en Kansas City (Missouri).
“Strickland fue condenado únicamente con el testimonio de una testigo (Cinthya) Douglas, que más tarde se desdijo de sus declaraciones, en las que lo identificó como uno de los cuatro autores” del crimen, argumentó Welsh en su resolución. En consecuencia, el juez pidió hoy “la liberación inmediata” de Strickland, de 62 años. En 2009, la misma testigo intentó lanzar un proceso para liberarlo.
En correo electrónico al Proyecto de Inocencia del Medio Oeste, Douglas solicitaba información sobre cómo ayudar a “alguien acusado por error”: “este incidente ocurrió en 1978, fui la única testigo visual y las cosas no estaban claras en aquel entonces, pero ahora sé más y quiero ayudar a esta persona si puedo”. No obstante, Douglas falleció en 2015 antes de que pudiera revocar su testimonio de forma oficial.
Este hombre fue condenado en 1979 por un jurado, compuesto íntegramente por blancos, y sentenciado a cadena perpetua sin derecho a libertad bajo fianza durante 50 años. Strickland fue juzgado en dos ocasiones: el primer juicio fue declarado nulo, dado que el jurado no fue capaz de ponerse de acuerdo para emitir un veredicto, y en el segundo se le declaró culpable.
A lo largo de los años se han multiplicado los esfuerzos para revisar este caso en busca de una exoneración de Strickland, que culminaron con una vista este mes en la que se examinaron las pruebas incriminatorias y su defensa presentó otras que lo exculpan.
Strickland es el reo que más años ha pasado por error entre rejas en el estado de Missouri y uno de los que más tiempo ha estado encarcelado erróneamente en la historia de Estados Unidos.
Foto: Captura.