Después de que el estado de Texas haya aprobado una nueva ley contra el aborto, Uma Thurman decidió hacer público su secreto mejor guardado con el fin de protestar contra la medida. La actriz no dudó en confesar que sufrió un aborto en su adolescencia, una experiencia que la marcó para el resto de su vida.
“Puede que ustedes no estén interesados en las opiniones de una actriz, pero dada esta atrocidad, siento que es mi responsabilidad alzar la voz”, comenzó diciendo en una columna publicada en The Washington Post.
“Al final de mis años de adolescencia, un hombre mucho mayor me dejó embarazada de forma accidental. Vivía con una maleta por Europa, lejos de mi familia, a punto de empezar un trabajo. Lo pasé muy mal pensando qué hacer. Quería quedarme con el bebé, pero ¿cómo?”, continuó.
Embarazada y con su madre ingresada grave en el hospital, Thurman mantendría una conversación telefónica con sus padres en la que se tomaría la decisión. “Jamás habíamos hablado antes sobre sexo, aquella fue la primera vez y fue terrible para todos. Me preguntaron sobre la situación de mi relación, que no era viable, y me advirtieron de la dificultad de criar un bebé yo sola, adolescente. Mi fantasía infantil de maternidad fue corrigiéndose en voz alta mientras sopesaba las respuestas a preguntas muy concretas. Estaba empezando mi carrera, no tenía medios para darle una casa estable, ni siquiera para mí. Como familia decidimos que no podía llevar a cabo el embarazo y llegamos a la decisión de que pararlo era lo correcto. Se me rompió el corazón”, expuso.
El aborto con anestesia local en una clínica de Colonia, en Alemania, no sería lo más duro. “Me dolió muchísimo, pero no me quejé. Había interiorizado tanto la vergüenza que sentí que me merecía ese dolor”, recordó. Sólo la comprensión del doctor que se puso en su lugar como si fuera su propia hija le aliviaría en parte: “Un gesto de humanidad que se ha quedado en mi mente como uno de los mayores momentos de compasión que jamás he vivido”, confesó.
La actriz entregó más detalles sobre su “secreto más oscuro”: “Mi vida ha sido extraordinaria, a veces con dolor, retos, miedos y pérdidas, como tantas otras mujeres, pero también he estado marcada, como para tantas, con fuerza y compasión. He concebido a mis mágicos y hermosos hijos con hombres a los que he amado y en quienes he confiado lo suficiente como para traer un niño a este mundo. No me arrepiento de mi camino. Aplaudo y apoyo a las mujeres que escogen otras opciones. El aborto que viví de adolescente fue la decisión más dura de mi vida, me causó angustia y hasta hoy aún me entristece, pero fue el camino a la vida llena de alegría y amor que he experimentado. Elegir no continuar ese temprano embarazo me permitió crecer y convertirme en la clase de madre que quería y necesitaba ser”, reveló.
Tras contar su experiencia, la actriz arremetió contra la ley de Texas. “Es una herramienta discriminatoria contra quienes están en desventaja económica y contra sus parejas (…) Las mujeres y los niños de familias ricas tienen todas las posibilidades del mundo y se enfrentan a pocos riesgos”, aseguró.
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